Cuenta que la mudanza fue un suplicio, de las piezas que adquirió se las encargó a un Coronel argentino que recomienda. Que espera verlos en París- no será difícil que Manuela venga directamente pues como de costumbre no tiene qué ponerse. Cuenta los planes de los próximos días y pasa dirección en Buenos Aires: Cangallo 466.